PEKADO MORTAL TEMPRANILLO

RIOJA

PEKADO MORTAL TEMPRANILLO

RIOJA

PEKADO MORTAL TEMPRANILLO es la apuesta con especial incidencia en la Rioja de un tinto de calidad, producido en el pueblo de Fuenmayor, en la Rioja Alta, donde tenemos nuestras parcelas de tempranillo de viñedos de 40 a 60 años que cultivamos y mimamos con mucho cariño.

Nuestro proyecto en la Rioja nos llevó hace 3 años a elaborar la primera cosecha de Pekado Mortal después de muchos años de experiencia en la zona. Buscábamos un vino fresco, de calidad diferencial de cara al mercado internacional.

VIÑEDO

Para la elaboración de Pekado Mortal partimos de la selección de uvas de 8 de nuestras parcelas, todas ellas distantes entre sí entre 5 y 10 km, situadas a 650 metros sobre el nivel del mar y plantadas en vaso a tresbolillo.

SUELOS

Los suelos de nuestros viñedos son pedregosos, donde difícilmente encaja otro cultivo. De hecho, Fuemayor conserva algunos de los calados más antiguos, de los siglos XVI y XVII, en las entonces casas señoriales de sillería que pertenecían a la nobleza.

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CATA

VISTA: Rojo granate de capa media, abundante lágrima y glicérico.
NARIZ: Alta intensidad aromática con predominio de fruta roja (fresa, cereza roja, fresa silvestre y grosella roja), con un fondo balsámico de vainilla y caramelo tostado, galleta inglesa y café.
BOCA: Fresco y equilibrado, con una acidez suave y un tanino dulce y amable. En el retronasal predomina una armonía aromática y el recuerdo de fruta roja en mermelada, ciruela pasa, vainillas y caramelo.

TEMPERATURA DE SERVICIO: entre 12 y 16ºC.
CONSUMO: potencial de guarda de 5 a 6 años en condiciones óptimas de conservación.
MARIDAJE: pescados, guisos, arroces y carnes blancas y rojas.
PRODUCCIÓN: 8.000 botellas de 75cl. de la cosecha de 2017.

VENDIMIA

Se lleva a cabo normalmente entre el 25 de septiembre y el 20 de octubre. Se realiza en cajas de 15 kg para proteger al máximo las uvas, preselección de racimos en el propio viñedo.

ELABORACIÓN

Una vez en la bodega, las uvas pasan por una segunda selección de racimos en mesa de selección; donde cada parcela es elaborada por separado para llevar a fin la personalidad individual de cada una de ellas. Después realizamos un despalillado y pasamos las uvas a un depósito de maceración para mantenerlas a 10ºC durante 6-8 días y extraer el máximo de potencial de esas uvas. Posteriormente dejamos que suba la temperatura por si sola y fermente con las levaduras autóctonas de la uva, procurando que la temperatura no suba nunca de 28ºC para preservar la expresión frutal durante 20-25 días. Una vez terminada la fermentación alcohólica, se descuba y prensa. El vino resultante se lleva a barricas de 225 litros donde hará la fermentación maloláctica y posterior crianza durante 12-15 meses en barrica de roble francés y americano, realizando batonnages periódicos para luego realizar el coupage en función de la personalidad de cada una de las barricas. Una vez embotellado, el vino permanece un mínimo de 12 meses en la bodega antes de su comercialización.